En delicados tejidos como la organza, las gasas o el tul, se posiciona como una de las mayores tendencias de cara a la temporada de buen tiempo de 2021.
Más largo, más corto, de un estampado concreto o de un color determinado… cada primavera tiene su vestido, pero siempre hay uno que resalta sobre el resto. Para vaticinar cuál será el vestido de 2021 y adelantarse a la tendencia tan solo es necesario mirar con atención las apuestas de las firmas de moda y encontrar un denominador común.
En esta ocasión, son los vestidos transparentes o semitransparentes, estilo naked dress, en tejidos como la organza, la gasa, el tulo a través de delicados bordados los que han logrado sobreponerse al resto y que ya apuntan maneras para convertirse en el vestido de la primavera y verano en mayúsculas.
Esta temporada se rebaja algo de atrevimiento añadiendo grandes volúmenes o detalles como volantes que cubren algo más de piel, haciendo que sean mucho más fáciles de llevar.
Apenas ha habido casa de moda que no haya contado con al menos uno en sus filas. La mayorÃa, han optado por versiones en tejidos semitransparentes y por colores lisos, pero tampoco han faltado versiones en tejidos de red o con motivos bordados.
De todas ellas, Dior, Valentino o Alberta Ferretti han sido las casas que más diseños transparentes han incorporado. Todos ellos además han coincidido en el largo maxi, hasta los pies. Asimismo, tampoco se dejan de lado opciones estampadas, especialmente con prints florales.
Cómo llevar el vestido transparente según las prescriptoras de estilo
Esta prenda puede resultar complicada de llevar en el dÃa a dÃa por su tipologÃa. Al dejar a la vista lo que se lleva debajo, la ecuación se complica. Por ello, existen dos opciones. O apostar por ropa interior en los mismo tonos para lograr un efecto discreto, o elegir conjuntos de lencerÃa, bodies o cropped tops que formen parte del estilismo final quedando a la vista. Asimismo, algunas insiders han optado incluso por llevar este tipo de vestidos por encima de pantalones y camisas.
Respecto a los colores, los vestidos blancos o negros pueden ser el primer paso perfecto para sumarse a esta tendencia, y los de tonalidades pastel los más destacados de cara a la primavera.
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